El dibujo contemporáneo



Tu no sabes lo que amo —por Salvador Núñez ( Humano 666 )

El arte de dibujar en estos tiempos no solo es recrear la forma de la manera más conveniente desde un punto de vista académico. Si bien es verdad que el ser conocedor del contorno y el volumen ayuda, esto no significa que uno ya sea un artista. La verdadera razón del arte está en decir lo que uno siente, para ello cualquier recurso es válido.

Muchos artistas, indiscutiblemente merecedores de estar en la historia del arte, ni siquiera sabían dibujar a la manera académica. No creo que a Munch o Van Gogh les hubiera interesado de sobremanera, eso no les quitó para nada su grandeza, más bien creo que justamente esa es su grandeza: "hablar" a su manera.

Ejercicio:
Sin ninguna preocupación de hacer "bonito" tu trabajo, visualiza una emoción, no una imagen necesariamente, una emoción. Como las emociones suelen escapar a la forma y al tiempo no te detengas si es que sientes que en el proceso nuevas cosas se te ocurren. Lo importante es liberar tu cohibición.

Cuando uno trabaja a la manera académica uno debe mirar la forma como si fuera un mapa, imaginar que si uno falla en ese contorno puede provocar una guerra entre naciones. Cuando dibujas de manera espontánea solo debes dejarte llevar, imaginar que estas frente a una mujer muy experimentada (si eres hombre) o frente a un hombre de mundo (si eres mujer) y que solo quieres conseguir afecto y dicha: Si eres niño, imagina que estas comiendo un helado y no debes parar, porque si lo haces tu mamá te lo quitará. Bueno, en verdad los niños no necesitan de este ejercicio porque ellos siempre pintan con emoción y felicidad, no para quedar bien, lo hacen de manera espontanea. Así que si eres un adulto recuerda como dibujabas de niño.

La idea no es hacer un mamarracho. Lo que se quiere es que plasmes una emoción, y esa emoción tiene una forma, recuérdalo: "Las emociones tienen forma y esa forma solo tú puedes darla." Si otro quisiera recrear una emoción similar es casi seguro de que la forma que recree será diferente (partiendo del hecho de que no ha visto tu trabajo, simplemente el mandato de recrear una emoción) . Es a lo que yo llamo matices emotivos, o razones armónicas.